Te ofrecemos los siguientes servicios:
Prueba auditiva: Se realiza para evaluar la capacidad de una persona para escuchar sonidos y detectar cualquier pérdida de audición. Esta prueba puede ayudar a detectar problemas auditivos temprano y prevenir daños adicionales en el oído. También puede ayudar a identificar la causa subyacente de la pérdida de audición, como infecciones del oído, daño al oído interno o una afección médica. Además, puede ayudar a determinar el tipo de audífonos o tratamiento que se deben utilizar para mejorar la audición.
Emisiones otoacústicas: Se realiza para evaluar la función auditiva del oído interno. Estas pruebas son específicamente útiles para detectar pérdidas auditivas en recién nacidos y para obtener información adicional sobre las posibles causas de una pérdida auditiva en adultos. La prueba se realiza midiendo la respuesta del oído interno a los sonidos que se emiten en el canal auditivo externo. Esto ayuda a identificar cualquier disfunción en el oído interno que pueda afectar la capacidad de una persona para escuchar correctamente.
Potenciales Evocados: Se realiza para evaluar la función del sistema nervioso y determinar si existen anormalidades en las vías neuronales que se encargan del procesamiento sensorial y motor. Estas pruebas pueden ayudar a diagnosticar trastornos del sistema nervioso central y periférico. También se pueden utilizar para evaluar a pacientes con lesiones cerebrales traumáticas o concusiones y para evaluar la función auditiva en pacientes con problemas de audición.
Manejo de tinnitus: El tinnitus puede ser causado por muchas cosas, y generalmente es un síntoma de una afección subyacente. El tratamiento para su tinnitus particular dependerá de la condición que lo está causando, la gravedad, cualquier problema acompañante, como la pérdida de audición, y el impacto que el tinnitus tiene en las actividades diarias.
Venta de protectores auditivos: Los protectores auditivos se deben usar al exponerse a ruidos fuertes para proteger los oídos de posibles daños y pérdida de audición debido a la exposición repetitiva a ruidos intensos.
En cuanto al uso de protectores auditivos al nadar, esto se debe a que el agua puede entrar en el canal auditivo y causar infecciones y dañar la piel delicada dentro del oído. Además, los nadadores regulares pueden sufrir de exostosis, crecimientos óseos dentro del canal auditivo causados por la exposición repetitiva al agua fría e incluso pueden sufrir pérdida de audición. Los protectores auditivos para natación crean una barrera impermeable para evitar que el agua entre en los oídos y, por lo tanto, reducen el riesgo de infecciones u otros problemas auditivos.
Manejo de cerumen: Cualquier persona puede necesitar un manejo de cerumen si acumula una cantidad excesiva de cerumen en el conducto auditivo externo, lo que puede provocar síntomas como dolor de oído, disminución de la audición, tinnitus (zumbidos en los oídos) y mareo.
Es importante hacer un manejo adecuado de la acumulación de cerumen ya que puede afectar la capacidad auditiva y en algunos casos puede provocar infecciones en el oído. Además, el exceso de cerumen puede dificultar la identificación de otros problemas auditivos, por lo que es importante retirarla para conocer el estado real de los oídos.
Sin embargo, es importante tener cuidado al retirar el cerumen, ya que puede empujarse más hacia el fondo del conducto auditivo y causar más problemas. Es recomendable que un profesional de la salud auditiva realice el procedimiento de manera segura y efectiva.